Aumenta tus ventas de ecommerce con fotografías interactivas
Cada imagen 360º está compuesta de al menos 36 fotografías diferentes del producto (una cada 10 grados), que después se unen mediante un software especial. El resultado es una imagen interactiva en la que el usuario puede rotar el producto hacia donde quiera y hacer zoom para ver más detalles.
Dentro de la fotografía de producto 360º, también podemos incluir una serie de destacados o «puntos calientes», por ejemplo, descripciones de las características que queremos resaltar, imágenes de algún detalle o incluso botones de compra.
La fotografía 360º puede servir para sustituir o complementar las fotografías estáticas de un artículo en un ecommerce, y permite que nos hagamos una idea mucho más realista de cómo es un producto en la vida real.